Esquivar
problemas es la peor solución que podemos buscar porque aunque sea lo más
fácil, siempre permanecerán ahí hasta el día en que los afrontemos. Tarde o
temprano siempre tendremos que hacerle frente a estos problemas y cueste lo que
cueste arrasar con ellos, arrancarlos de raíz, sino nunca podremos superar
nuestros errores y aprender de ellos.
Errores
que te marcan, dejan una cicatriz en vos para que los recuerdes por el resto de
tu vida.
Es
momento de decir verdades y pagar el precio de nuestras acciones.